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Tienda online especializada en llaves inglesas en liquidación

¿Cuándo y quien inventó la llave inglesa?

La llave inglesa es una de las herramientas más utilizadas, tanto por profesionales como por personas que la usan de manera no regular sino en ciertas ocasiones, pues su mayor fortaleza es la ajustabilidad que poseen cuando de atornillar a tuercas o piezas se refiere, pues consta con un sistema de enroscado entre las pinzas de la llave.

La llave inglesa se encuentra desde hace muchos años en el mercado, pero fue a mediados del siglo XIX que se dio a conocer de manera mucho más amplia, pues permanecía en el anonimato.

La primera patente se le dio el derecho (por llamarlo de alguna manera) a Solymon Merrick en el tan lejano 1836.

¿Cómo surgió la llave inglesa?

Para el oficio de fontanero o albañil es necesario contar con un gran número de herramientas pues el tamaño de las piezas se ve alterada debido a que cada una tiene una medida distinta. En este caso Johan Petter Johansson en 1892, se vio en la para nada envidiable necesidad de llevar consigo varias llaves fijas que eran voluminosas y obviamente muy pesadas. Así que compactó todas estas herramientas en una sola llave que permite ajustarse a las medidas que se requieran para trabajar.

El solo imaginar que vas a salir a trabajar, tener que cargar un peso sumamente exagerado y cuando empieces a laborar tienes que buscar en tu maleta una por una la llave que puede que te ayude a fijar esa pieza, para luego descubrir que no es la indica y la pieza quedó mal ajustada por el agarre, sería muy triste ser un obrero en los años pasados, pero gracias al ingenio de Johansson las futuras generaciones de obreros no tuvieron que esperar hasta poder encontrar una llave que le sirviera.

¿Quién fue el creador de esta herramienta?

Pues la historia no es muy concreta con respecto a cuál de estos personajes fue el creador asegurado, se puede llegar a un acuerdo en el que todos trabajaron en la misma herramienta agregándole más cosas que el anterior, pues la primera fecha data del año 1836 con la llave Solymon Merrick. En ese caso se puede decir que sería una llave de tipo fija hasta que en 1892 el sueco Johan Petter Johansson innovó las ganas de no querer cargar más peso lo cual se tradujo en una idea brillante, usar la misma herramienta con una gran diferencia, una tuerca o rosca dentro de la llave que permite abrirla por sus mandíbulas gracias a la instalación de la rosca.

Otra llave que es muy popular es la llave Stillson o también nombrada como llave francesa. Fue creada en el año 1869 por Daniel Chapman Stillson y es una de las herramientas encargadas de dar un buen agarre a las piezas mientras se tratan de ubicar en lo que se esté reparando, quedando bien colocado sin pasar por una aprensión floja. Pero esta llave puede llegar a ser utilizada en lugares que una llave inglesa no podría llegar con facilidad.

¿Cuál es su utilidad en la vida cotidiana?

La llave inglesa no solo es para personas cuyo trabajo sea la fontanería, por ejemplo. Una persona sin una gran experiencia puede utilizar una herramienta de estas, pues no es necesario conocer a profundidad el arte de la reparación para saber enroscar una tuerca.

Siempre surgen desperfectos en instalaciones del hogar donde no es necesario que se contrate a un fontanero u obrero para trabajar, una tuerca o tubería que se floja se puede corregir con una llave inglesa, pues solo se sostiene por el mango, se elige la dimensión de apertura de las piezas, se coloca alrededor del tubo (o de la pieza que se desee apretar), se va enroscando hasta que quede firmemente ajustado y solo se tiene que apretar, y ese desperfecto como lo puede ser una gotera será cosa del ayer.

¿Cómo se fabrica una llave inglesa?

Están hechas a base de acero, dependiendo del origen de la marca serían distintos métodos de fabricación, en su mayoría son de acero y su mango está hecho de un material suave que no lastima la mano de quien tenga la función de manipularla.

¿Existen diferencias entre llave inglesa y llave francesa?

Son muy similares pues ambas contienen un sistema de enroscado para así poder ser utilizadas con piezas de distintos tamaños, pero la llave francesa o llave Stillson está capacitada para piezas de mayor envergadura.

Las llaves francesas vienen en presentaciones desde 8 pulgadas hasta 40 pulgadas, su peso es considerable y estas llaves sí son recomendadas a personas que trabajan profesionalmente, no se le aconseja comprar a una persona que en su vida cotidiana no utilice herramientas tan grandes.

Otro beneficio es que su agarre no desgasta lo que serían las piezas, ya que sus mandíbulas tienen un diseño distinto a otras llaves que carcomen el material de las mismas.

Las mandíbulas pueden ser lisas o de picos, ambos son totalmente de acero, pero las llaves francesas son muy utilizadas en ambientes húmedos, también existe gran diversidad de llaves que son de acero inoxidable perfecta para esos ambientes.

Lo revolucionario de estas llaves es su capacidad de ajuste pues son de medias cambiables, al contrario de otras herramientas como la llave española que son medidas fijas, además las llaves inglesas son sumamente fáciles de aprovechar y como se mencionó antes no es necesario saber de todas las herramientas o conocer la historia del destornillador para ponerte manos a la obra.

Recomendaciones

Si deseas tener una llave inglesa ya sea porque la necesites para tu trabajo o sencillamente quieres tener una en casa para cualquier eventualidad, te aconsejamos revisar páginas donde muestre un catálogo detallado de llaves de diversidad de tamaños y marcas y que así puedas adquirirlas en línea sin ningún tipo de problema. Si eres de un tono más tradicional, dirigirse a un establecimiento físico es también aceptable, pues existen asesores que brindarán apoyo para que sepas escoger la mejor opción.

Tipos de llaves inglesas

Las llaves inglesas están entre esas herramientas cotidianas que podrías pasar por alto hasta que se necesiten. Con frecuencia, puedes agarrar cualquier llave que esté cerca para abordar cualquier proyecto al que te enfrentes. Pero en realidad hay bastantes tipos diferentes de llaves inglesas por ahí, y muchas están especialmente diseñadas para manejar una tarea específica.

Una llave inglesa o llave ajustable se usa para girar una tuerca, tornillo o fijación similar que se gira para apretar. La llave inglesa se usa para sujetar la fijación dada ya sea una tuerca, perno, tornillo de concreto, etc. y girarla, permitiéndole aplicar un par de torsión y apretar la tuerca sobre el perno.

Por lo general, están hechos de acero forjado y recubierto en cromo, níquel o en fosfato para detener la corrosión. Las llaves de mayor calidad tienden a estar hechas de aleaciones de cromo-vanadio y, en algunos casos, incluso de titanio.

Los siguientes tipos de llaves inglesas abarcan la gama de estilos y funciones, aunque hay más llaves por ahí que son extremadamente raras o especializadas.

Tamaños de llave

El tamaño de la llave inglesa habla acerca del tamaño de la tuerca o tornillo que encajará en las mordazas. Se miden en medidas métricas (milímetros) o imperiales (pulgadas o milésimas de pulgada).

Interesantemente, antes de alrededor de 1920, la medición se realizó con el diámetro de la parte roscada de la tuerca en lugar del exterior de la tuerca. Esto no es algo que hemos visto nosotros mismos, pero encontramos que es bastante obvio por qué ese sistema de medición no duró mucho.

Clases de llave

Hay algunos términos comunes que se usan para clasificar las llaves en subgrupos. Aunque saber estos términos le dará una mejor idea del propósito de una llave, todos son intercambiables con el término amplio de “llave” (ejemplo: llave Allen contra llave hexagonal).

Llaves: las llaves son generalmente muy especializadas y con mayor frecuencia aparecen como una llave pasada de moda sin dientes o como un zócalo en forma de T que puede tener una punta masculina o femenina. Las llaves Allen, los abrebotellas y las manivelas para ventanas son todos tipos de llaves.

Llave inglesa: las llaves inglesas son llaves que se usan para girar la cabeza de un perno o tuerca y tienen un diseño que tiene pasadores o ganchos en lugar de un extremo normal. El término se usa más comúnmente en el inglés británico para describir las llaves en general, aunque se ha visto algo de uso en los Estados Unidos como un subgrupo de llaves. Para más información, le sugerimos que continúe leyendo.

Los tipos de llaves ajustables

Llave inglesa de Richard Clyburn

En el siglo XIX empezaron a surgir muchas invenciones llegando a verse en Inglaterra entre todas ellas, una llave ajustable creada por Richard Clyburn, es por ello que desde ese entonces se les conoce como llave inglesa. A pesar de ello en varios países de ibero américa se les conoce como llave francesa.

Llave mono

Durante esa época pero al otro lado del atlántico específicamente en Estados Unidos, se usaba un invento de una llave ajustable grande que podía usarse para ajustar las ruedas de las carretas de la época que eran tirados por caballos o mulas, esta llave se llamaba llave mono o llave monkey.

Llave inglesa de Petter Johansson

Entre los años de 1891 y 1892 el inventor sueco Johan Petter Johansson invento y patento su llave más innovadora de la época que era especial para los trabajo de fontanería permitiendo con ello reparar cualquier tubería rota, esta llave presentaba mejoras significativas de la llave creada por Daniel Stillson de aquel entonces y que fue introducida al mercado 20 años antes.

Llave inglesa de Daniel Stillson

Daniel C. Stillson fue un mecánico de Walworth Company, en Cambridge, Massachusetts, y quien creó la primera llave de este tipo. El 12 de octubre de 1869.

Luego para el 17 de agosto de 1888, el inventor sueco Johan Petter Johansson, obtuvo su primera patente sobre la llave ajustable para tubos. La idea surgió después de que estableció su compañía. En aquel entonces, las dimensiones de las tuercas estaban pobremente estandarizadas, por lo que cada vez que un comerciante estaba trabajando, necesitaba un carro para llevar todo un juego de llaves de tubo fijas con él. Johan Petter Johansson inventó una herramienta que podía sujetar tuercas de diferentes dimensiones.

Una vez conocidas los diferentes tipos de llaves inglesas y conocer un poco su procedencia e historia es hora de hablar de ellas como es que se ven en la actualidad.

La llave inglesa.

Podemos empezar diciendo que su nombre varía dependiendo de cada región y del país como llave sueca o llave francesa, sin embargo su nombre más común es el de llave ajustable.

Esta herramienta presenta 2 mordazas que son lisas y paralelas y se desplazan en ángulo de 15 grados permitiéndote trabajar en lugares estrechos. Una parte de la mordaza se mantiene fija al cuerpo de la llave y la otra parte de la mordaza se mueve, con este movimiento te permite cerrar y abrir la llave.

La parte móvil de la mordaza posee una especie de cremallera que esta dentada y se engrana con un tornillo en forma helicoidal que puedes girar y con ello modificar la apertura de cada cara con el fin de llegar a tener la medida que necesitas.

La elaboración de las llaves inglesas se realiza en acero estampado y forjado que por lo general son cromados con el fin de evitar con ello la corrosión. Este tipo de herramientas cuando son hechas de alta calidad pueden fabricarse en aleaciones de vanadio-cromo y en ciertos casos especiales de titanio. En algunos casos su composición varía dependiendo del sector y lugar donde trabajara la herramienta correspondiendo con ello a que sea antichispa o anticaida.

Este tipo de llaves vienen en varios tamaños dependiendo siempre del diámetro o la cabeza del perno o de la tuerca que pueden encajar en ella, sus medidas puede ser en milímetros, en pulgadas o milésimas de pulgadas. Algunas marcas reconocidas elaboran llaves inglesas con medidas métricas y una longitud entre 110 a 770 mm y la mordaza puede abrirse entre 13 a 85 mm.

Para evitar que este tipo de llave de inglesa se dañe es necesario que se use de manera correcta ajustando con ello la móvil mordaza a la cabeza del perno o tuerca con el fin de evitar el redondeo. Es necesario evitar a toda costa el redondeo debido que esto podría crear una sobrecarga en la mordaza que se mueve. No se recomienda usar esta llave en lugares muy reducidos.

A continuación te mostraremos los principales usos que tienen las llaves inglesas.

Gas y plomería

Cuando existe varios diámetros de cañerías y tamaños de pernos y tuercas un llave inglesa te permite manejarlos con mucha facilidad sin importar que artefactos estés instalando o reparando.

En la elaboración y ensamblajes de muebles

Usando una llave inglesa fácilmente puede adaptarte a los tamaños diferentes que hay en los pernos y tuercas que tienen estos muebles, quitándote el dolor de cabeza de tener varias llaves, y reduciendo la pérdida de tiempo buscando una llave con la medida correcta y pasando de tamaño de un perno o tuerca a otro.

Reparación de automóviles

La llave inglesa es única a la hora de reparar un coche ya que te permite hacer un apalancamiento necesario para aflojar y ajustar un perno o tuerca con difícil acceso o de poco espacio.

Para reparar motos y bicicletas.

Esta herramienta es la ideal para apretar y extraer los tornillos que se pueden encontrar en un espacio reducido.

Las opciones que hay en las llaves inglesas

Muchas llaves inglesas hoy en día se ofrecen en el mercado con infinidades de características que tú puedes elegir de acuerdo a tu necesidad. Algunas compañías fabrican líneas de llaves con escalas graduadas ya sea en pulgadas o en milímetros, que te permiten ver de manera rápida los tamaños de los elementos para sujetarse a la hora de girar.

Incluso puedes conseguir en el mercado llaves inglesas que posee un diseño de llave fija del siglo pasado conocido como llave de cocodrilo, este tipo de diseño consta de un ángulo cortado y rebajado en forma de V en ambos lados permitiendo sujetar cualquier perno o tuerca que pueda entrar en ellas.

Otros diseños vienen con una moleta lateral, permitiendo que estas llaves sean ofrecidas y sean un 40% más precisa que otras llaves inglesas que vienen con un sistema de tuerca central de acuerdo a los tamaños equivalentes.

Existen otros modelos que traen un mango ergonómico que te permite tener más agarre a la hora de aplicar el uso de la fuerza manual y con ello son más seguras a la hora de usarlas en varias posiciones de trabajo, permitiendo con ello reducir posibles accidentes.

La mayoría de todas las presentaciones tienen un acabado cromado o de fosfato con un tratamiento especial evitando con ello la corrosión y respondiendo a las estrictas normas internacionales como ISO, UNE, DIN, entre muchos otros.

Llave de perro o llave Stillson.

Es una llave inglesa que fue diseñada para ajustar accesorios y conexiones del mundo de la fontanería, ayudando al agarre gracias a su práctica mordaza dentada que puede adaptarse a cualquier tamaño de algún tubo o conexión a sujetar. En fin es una herramienta muy útil no solo usada por plomeros sino también por mecánicos.

Tipos de llave inglesa Stillson.

Hoy por hoy conseguirás varios modelos de llaves Stillson en el mercado

Llaves rectas

Es un tipo de llave popular que mantiene un diseño similar al que fue creado en los años de 1869.

Su uso implica en el ajuste de tuberías de diferentes tamaños desde ¾ de pulgada hasta más de 8 pulgadas.

Es común verlos elaborado en acero forjado o en aluminio con un tratamiento especial contra la corrosión.

Llaves acodadas

Su diseño es ideal para lugares estrechos ya que con el puedes sujetar la conexión o el tubo sin dañar los elementos alrededor.

Por lo general se usa cuando la tubería esta paralelo a otro o cuando este se encuentra en un ángulo difícil de llegar.

La forma de las mordazas está en forma paralela al mango con una cara estrecha.

Acodadas para extremos

Esta llave posee un ángulo diferente a los demás permitiendo su uso en aquellas tuberías que están próximos a la pared o que por una razón es de difícil acceso como los codos que están a 90 grados.

Puede ser usado para facilitar en cierta manera sujetar la tubería ya que esta llave no se resbala.

Llaves de palanca compuesta

Permite magnificar la fuerza aplicada con el fin de aflojar aquellas uniones muy problemáticas.

Su sistema de palanca permite aflojar esas uniones que están atascadas por causa del óxido o que están muy dañadas debido a su antigüedad.

Llaves Hexagonales

Tiene un diseño diferente a las otras llaves, sin embargo su forma hexagonal ayuda en el agarre de aquellos pernos y tuercas que poseen forma de hexágono, cuadradas entre otras más.

Llave inglesa para tuberías.

Esta herramienta presenta un diseño diferente al diseño inventado por J.P Johansson en los años de 1888 especial para los fontaneros presentando con ello dos mangos en cual uno de ellos posee una tuerca donde puedes regular la fuerza de cómo se cierra las mordazas.

Es común verlas hechas en aleaciones de acero con su mordaza templada y su respectivo tratamiento anti corrosión en fosfato. Algunos modelos presentan un acabado más costoso debido a su niquelado para brindar una protección máxima contra el óxido. Algunas presentaciones vienen con mangos ergonómicos presentando así dos versiones: uno para tuberías de esquina con unas tenazas que están a 45° y sirven para trabajar en zonas de difícil acceso y otras en forma universal.

En resumen, te hemos mostrado los diferentes tipos de llaves inglesas con el fin de que puedas comprar aquella según sea tu necesidad, ya sabes un poco de cada una de sus características y los usos en donde puedas emplearlas.

¿Qué materiales se utilizan en la elaboración de una llave inglesa?

La llave inglesa es una herramienta que fue diseñada para lograr la manipulación de tornillos y tuercas posee partes movibles dentro de su mismo sistema y con el paso del tiempo, esto ha sido de gran ayuda para quienes desempeñan oficios en los cuales la utilización de esta herramienta es fundamental, debido a que les simplifica horas de trabajo haciendo mucho más fácil la jornada.

Entre las partes que componen una llave inglesa, se encuentran las piezas movibles dentro de su mismo sistema, esto supone una notoria ventaja con respecto a otros modelos debido a que son de tamaños fijos y es muy difícil que funcione para otro tipo de formas como en su historia en el inicio de las llaves.

En su mayoría las llaves inglesas, sea cual sea su tipología, son fabricadas de acero (inoxidable o no), esto garantiza su durabilidad, dureza y resistencia para casi cualquier tipo de trabajos. Sin embargo, lo recomendable es que si se va a trabajar en ambientes húmedos se utilice una pieza de acero inoxidable debido a que esto evitará su oxidación al ser expuesta a este tipo de temperatura y al contacto con el agua.

Proceso de fabricación de una llave inglesa

Antes de poder obtener esta herramienta en nuestros hogares, deben pasar por un proceso de fabricación en el cual se someten en primer lugar a la oxidación para con estos evitar que se manchen o deterioren con el paso del tiempo o por el contacto con superficies húmedas.

Seguidamente se pasa por el temple que es el proceso capaz de otorgarle la dureza y la fuerza necesaria para la manipulación de piezas como tuercas y tornillos. En este paso debe ser ingresada a un horno cuyas temperaturas oscilarán entre los 800 a 900 °C y luego ser enfriadas de golpe.

Por último, esta herramienta pasa por otra técnica de horneado, pero a una menor temperatura (entre 350/400 °C) y esto evitará que se quiebre o se deteriore rápidamente.

Capacidad de aleabilidad

La aleabilidad es la capacidad de mezclarse para dar lugar a otros materiales, en este caso sería la capacidad del acero de formar nuevos compuestos. En el acero se encuentra un porcentaje de hierro como principal componente y carbono y luego de lo que correspondería al proceso de fabricación, es gracias a la aleabilidad que podemos obtener las mejores llaves inglesas del mercado.

Conozca cuales son las mejores llaves inglesas por su composición química

Topex

Este modelo de llave inglesa, posee cubiertas que permiten su sana manipulación sin temer el hecho de que las manos de quién la utilice puedan salir lastimadas en el proceso. Asimismo, tiene un perfecto agarre y enroscado para las piezas que necesiten ser colocadas o que se estén trabajando.

Y, por último, pero no menos importante, su capacidad de resistencia es fundamental y viene dada gracias a la excelente calidad de los materiales con los cuales es fabricada. Asimismo, forman parte de la gama de llaves inglesas más accesibles del mercado por lo que el precio no debe resultar problema.

Llave española

Esta herramienta de mano es utilizada para el correcto ajuste de partes en las maquinarias, está formada por una barra de acero consta de dos mandíbulas en sus extremos, de forma que será donde las tuercas sean ajustadas.

Las medidas son distintas por cada llave española, y sus mandíbulas también lo son entre sí. Además, el hecho de que posea dos aberturas en forma de U, la hace ideal para aflojar y ajustar tuercas y tornillos de preferencia hexagonales.

Sin embargo, deben ser utilizadas con sumo cuidado debido a que pueden correr el riesgo de aislarse después de un prolongado periodo de uso.

Recomendaciones

“No te quedes conforme teniendo una sola llave, pues puede ser más grande o más pequeña de lo necesario y la reparación no quedaría del todo bien, por ello es bueno tener un gran equipo de herramientas propio de una gran versatilidad”.

“No caigas en el error de creer que, porque todas las llaves son de acero, tienen la misma calidad, pues dependiendo de la marca este será tratado de una forma u de otra lo que le otorga a la herramienta más o menos rendimiento y duración”.

“Existen llaves inglesas que, con solo rozar un poco el agua, al día siguiente cambian de color debido a que se oxidan, esta clase de llaves son las que normalmente se tratan de evitar puesto que no les duraría mucho tiempo. Claro está que el trato que se les dé influye mucho”.

En las recomendaciones, les ofrecimos llaves que son de acero inoxidable, debido a que hay personas que ciertamente trabajan con materiales donde no existen temperaturas húmedas.

Pero en el caso de un fontanero, no puede indicársele que solo trabaje con tuberías secas, sería absurdo, y por ello una de las especificaciones es investigar sobre qué tipos de llaves reaccionan a que tipos de ambiente. Pues la llave que sería más útil en una situación puede ser que no lo sea en otra distinta.

Los precios pueden variar dependiendo del lugar donde se esté consultando. Asimismo, puedes ver otras herramientas semejantes como alicates extensibles, tablas de medidas para tornillos, tipo de llaves mecánicas y sus medidas, para que vayas dibujando en tu mente el lugar donde vas a poner tus futuras herramientas que son imprescindibles en cualquier hogar.

¿Cómo saber qué llave resulta mejor?

Esta interrogante va a depender de dos factores fundamentales que son: el tipo de trabajo a realizar y el tipo de persona que lo realizará. En la actualidad existen muchas clases de llaves inglesas que van desde la más tradicional hasta la más automatizada y pueden complicar o simplificar las labores según sea visto.

Por esta razón es importante tener el conocimiento necesario al momento de adquirir alguna de estas herramientas y si no se tiene, buscar la asesoría necesaria para que sea una compra adecuada y segura.